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El Real Madrid ha puesto sus ojos en uno de los defensas más prometedores del mundo, William Saliba del Arsenal, y ha diseñado un plan estratégico para incorporarlo a su plantilla sin tener que pagar una fortuna. Según las informaciones, el club blanco está dispuesto a esperar hasta el verano de 2027, cuando expire el contrato del francés con los Gunners, para ficharlo sin coste alguno. Este plan refleja la paciencia y visión a largo plazo de Florentino Pérez, quien busca reforzar la defensa con un talento de primer nivel sin desembolsar los más de 100 millones de euros que actualmente pediría el Arsenal.
Saliba, a sus 23 años, es considerado por muchos como uno de los mejores defensores del planeta, con un precio de mercado que podría superar los 100 millones de euros en el futuro cercano. La estrategia del Real Madrid incluye un seguimiento exhaustivo de las actuaciones del jugador, así como una campaña de seducción para asegurar que el francés no renueve su contrato con el Arsenal antes de tiempo. Este enfoque no es nuevo para el club, ya que han utilizado tácticas similares con jugadores como Kylian Mbappé y Trent Alexander-Arnold, logrando incorporaciones de alto perfil a costo cero.
El interés del Real Madrid en Saliba no es solo por su juventud y calidad, sino también porque encaja perfectamente en el estilo de juego que Carlo Ancelotti quiere implementar. Aunque el Arsenal ha demostrado interés en mantener a Saliba, ofreciéndole contratos mejorados y un papel central en el equipo, la promesa de un proyecto ambicioso y la historia de éxitos del Real Madrid podrían ser factores decisivos para el jugador. Además, la plantilla del Real Madrid necesita estabilidad en la zaga, considerando las lesiones recurrentes y la edad de algunos de sus defensores actuales.
Por ahora, el Real Madrid se arma de paciencia, sabiendo que este plan maestro podría traer uno de los fichajes más importantes de la próxima década sin la necesidad de grandes inversiones. Si todo sale según lo planeado, Saliba podría convertirse en la piedra angular de la defensa merengue, ofreciendo solidez y liderazgo para los próximos años. La clave para el éxito de esta operación será mantener el interés del jugador y evitar que el Arsenal logre retenerlo con una renovación de contrato antes de 2027.
